Diario reflexivo 7
Diario reflexivo VII
- Créditos
Diario realizado por Noelia Martín Rodríguez alumna de segundo en el Grado de Maestro en Educación Primaria
- Introducción
Como séptima entrada del diario reflexivo, voy a comentar que hicimos en la semana del 10 al 14 de abril y los aspectos que me llamaron la atención.
- Desarrollo
En la sesión teórica de la semana seguimos con las exposiciones de mis compañeros de clase, en este caso los temas que se trataron fueron los siguientes: “Las relaciones arte-artesanía”, “La tipografía y sus posibilidades plásticas”, “Lenguajes gráficos: el diseño gráfico” y “El arte contemporáneo, la performance”.
Yo me voy a centrar en el tema de arte contemporáneo, la performance.
Lo primero que me gustaría hacer es explicar ambos conceptos:
- Arte contemporáneo: este término se usa para categorizar aquellas obras que se realiza en la época contemporánea, en el periodo actual. Lo que engloba obras desde mediados del siglo XX hasta hoy.
Dentro de este arte nos encontramos muchos estilos, técnicas, obras, enfoques... por esto una característica de este arte es la gran diversidad que nos encontramos.
Este tipo de arte se caracteriza también por tratar temas de la realidad y por conectarse con el contexto de la persona que lo está viendo. Incluso vemos obras en las que participan en activo el público, lo que nos lleva a hablar del siguiente tema, las performances.
- Performance: es una disciplina artística en la que vemos el arte en vivo, combina muchas áreas como música, baile, teatro, arte... y el artista en este caso actúa frente al público que le está viendo en directo.
Esta disciplina nace con los artistas del dadá en el Cabaret Voltaire.
Al igual que el arte contemporáneo, la performance aborda temas de la actualidad, temas políticos, culturales y sociales buscando transmitir algún tipo de mensaje.
Me gustaría hablar sobre una de las mujeres más importantes en esta disciplina: Marina Abramovic
Es una artista serbia a la que se le considera la madrina de la performance.
En su primera performance usó 20 cuchillos y dos grabadoras, en la performance se vió como Marina jugaba a dar golpes con el cuchillo mientras tenía la mano abierta con los dedos separados, cuando se cortaba cambiaba al otro cuchillo e iba grabando todo lo que hacía. Tras cortarse 20 veces, reproducía la grabación e intentaba imitar los mismos movimientos y sonidos. El mensaje de está obra era la unión del pasado y el presente.
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